''Hay cosas, que no se pueden explicar ni con una turbia, pero sincera mirada. Quizás, esas cosas, son las que en tu momento de decadencia final, llegas a expresar con tan solo el leve y sordo sonido de tu voz. Aquel instante, me hizo ver que ese sonido, es el sonido que expresa todo lo que uno es… ''. Fue entonces, cuando sonó el despertador.
Recién levantado, esas frases seguían dando vueltas en mi cabeza, no me dejaban actuar con normalidad, por lo que decidí seguir la rutina de todos los días. Llegada ya la tarde, mirando desinteresadamente un programa televisivo, esas frases, volvieron a acecharme, haciéndome desconectar de la realidad. Al principio, mis pensamientos se intercalaban con los diálogos del programa, pero poco a poco esa estúpida distracción fue desapareciendo, dejándome en mi libertad mental. Sin darme cuenta ya estaba dormido.
Bueno esto es parte de la idea que estaba escribiendo en algún momento la terminaré a ver si os mola de momento lo que llevo.
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